Para los polímeros, el tema del contacto con alimentos y agua potable es de fundamental importancia, sobre todo para las aplicaciones que contienen, procesan y transportan lo que comemos y bebemos. Desde la producción agrícola y las granjas, a lo largo de toda la línea de procesamiento, hasta la mesa: la seguridad es un imperativo. LATI garantiza la calidad de sus materiales y la conformidad a los estándares internacionales para la seguridad en campo alimentario. Con una propuesta que abarca del PE al PEEK, articulada en materiales transparentes como el PPSU y eco, en compuestos estructurales, antiestáticos, autolubricantes y detectables por los detectores de metales.
LATI propone compuestos certificados NSF/WRAS/ACS/KTW para el transporte de agua potable fría y caliente. Materiales reforzados con los que sustituir al latón en válvulas y grifos de todo tipo, para realizar racores y distribuidores, para elementos internos de calderas o contadores. Resistentes a desinfectantes y descalcificantes. A una fracción del peso y del coste del metal.
La atención por la seguridad de lo que encontramos en nuestra mesa acompaña toda la cadena de producción. Materiales estructurales aptos para el contacto con alimentos sustituyen al metal. Grados antiestáticos operan en ámbitos ATEX en presencia de piensos, harinas y otros polvos que potencialmente podrían explotar. Compuestos MDT detectables por el detector de metales y por los rayos X evitan la contaminación accidental de los alimentos con fragmentos plásticos.
Certificaciones¿Profesional o doméstica? ¿De cápsula o manual con polvo? Cualquiera que sea la elección, los compuestos LATI lo dan todo para dispensar el café perfecto. En el interior de la máquina, con materiales estructurales diseñados en PA, PPA, PPS, PSU y PEEK resistentes a presión, temperatura de infusión y descalcificantes, en el exterior con partes estéticas de elevada estabilidad dimensional. Obviamente, todo ello apto para el contacto con nuestra bebida favorita.