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BTSR, empresa cuyo nombre significa Best Technology Study Research, desarrolla soluciones tecnológicas avanzadas para el control de la tensión del hilo en procesos industriales altamente automatizados presentes, principalmente, en el sector textil. Los dispositivos de BTSR tienen como objetivo mejorar la eficacia de los sistemas de gestión del hilado y la calidad del producto final.
La pasión, la innovación y la tecnología son la base del desarrollo de la empresa de Varese, que ha optado por no deslocalizarse y, de hecho, su domicilio social y su centro de producción se encuentran en Italia, en Olgiate Olona, provincia de Varese. El visionario, previsor y apasionado director general de la empresa es Tiziano Barea, quien fundó este orgullo de la industria lombarda en 1979 y que desde entonces no ha dejado de invertir, innovar y hacer crecer su empresa, tanto que en la actualidad la marca BTSR es reconocida por los profesionales del sector textil, y también de muchos otros sectores, como sinónimo de garantía e innovación.
En BTSR se diseñan y fabrican sensores electrónicos y sistemas inteligentes para supervisar el deslizamiento del hilo y controlar la tensión, además de los principales parámetros de calidad de todo tipo de hilos: no solo los más tradicionales, sino también elastómeros, fibras de vidrio y fibras de carbono. La primera patente se remonta a 1981 y en la actualidad tiene unas 500 registradas en todo el mundo: el objetivo es confirmar su posición de liderazgo mediante el desarrollo de soluciones pioneras capaces de responder a las necesidades del mercado y anticiparse a ellas.
BTSR está presente en todo el mundo gracias a su red capilar de distribución internacional y puede garantizar una asistencia cualificada en los principales mercados: desde Europa, pasando por América del Norte y del Sur, hasta todo Extremo Oriente.
Los principales sectores industriales en los que opera BTSR son la calcetería, el punto, los textiles médicos, la hilatura de textiles técnicos, las alfombras y la tela vaquera, entre muchos otros.
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BTSR produce dispositivos electrónicos de alta calidad y ha seleccionado una amplia variedad de plásticos de ingeniería para sus productos. De hecho, los polímeros técnicos son materiales que siempre pueden satisfacer las exigencias peculiares y complejas de las aplicaciones industriales más exigentes: en primer lugar, la industria textil, donde las cargas electrostáticas, el polvo y los productos químicos presentes, así como las condiciones de trabajo, pueden poner en peligro el rendimiento y el funcionamiento de los dispositivos.
Los servicios de Investigación y Desarrollo y de asistencia técnica de LATI están siempre disponibles para colaborar en el desarrollo de soluciones personalizadas en función de las necesidades del cliente: así es como nació la asociación entre BTSR y LATI en 1981.
BTSR explica cuáles son los problemas que ha encontrado y las necesidades de su producto o cliente específico, y LATI responde proponiendo material más eficaz, sin ningún compromiso.
Los materiales elegidos por BTSR son todos compuestos del más alto nivel técnico.
Para garantizar el perfecto funcionamiento de los sistemas destinados al control de la alimentación del hilo y los diversos sensores de tensión y rotura es indispensable proteger de las radiaciones electromagnéticas la electrónica del interior de estas máquinas. Por este motivo, BTSR solamente utiliza compuestos LATISHIELD con fibra de acero para el cuerpo y la cubierta de sus dispositivos. Las microfibras metálicas que contienen estos materiales garantizan la máxima protección contra la interferencia electromagnética y una conductividad eléctrica uniforme de la carcasa polimérica.
Por su parte, cuando se requiere tanto rigidez estructural como conductividad eléctrica, se recurre a resinas como el PPS, el PEEK y las fibras de carbono. En el mundo de la hilatura, es imposible prescindir de la conductividad eléctrica de todas las piezas móviles con respecto al hilo, ya que de lo contrario se acumularían cargas electrostáticas y, por tanto, polvo. Por ello, BSTR prefiere el carbono de mayor rendimiento a las fibras de vidrio tradicionales. El PPS y el PEEK también son polímeros que pueden utilizarse de forma satisfactoria en sitios donde haya que gestionar los fenómenos abrasivos propiciados por el paso del hilo, un reto tradicionalmente asignado a la cerámica sinterizada y que hoy ganan en muchos campos los compuestos autolubricantes.
No solo la resistencia mecánica, sino también la resiliencia y la robustez: en presencia de tensiones impulsivas, las fibras de refuerzo dan paso a elastómeros técnicos capaces de endurecer las resinas poliméricas para permitir que los impactos y las vibraciones se disipen sin romperse.
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Una asociación, la de BTSR y LATI, que va mucho más allá de las cuestiones técnicas y empresariales y que está arraigada en valores e ideas comunes, en primer lugar, el enfoque y el compromiso con la sostenibilidad social y medioambiental.
BTSR está ubicada en un gran parque que cuida la propia empresa. El cuidado del medio ambiente se muestra en el cuidado y el seguimiento del consumo energético y en la voluntad de producir toda la energía necesaria para los procesos de la empresa de forma autónoma, gracias al sistema fotovoltaico de más de 500 kWp en la sede de Olgiate Olona.
El compromiso social de la empresa se refleja en numerosas iniciativas de apoyo a las personas con dificultades y de fomento de la educación y el desarrollo de niños y jóvenes.
Un ejemplo es el proyecto BTSR Africa, con el que se compromete a apoyar el trabajo de un grupo de misioneros en Guinea-Bissau. La organización con sede en Varese ha adoptado un niño africano por cada colaborador, ha construido una guardería, una escuela, un centro polivalente, una clínica médica y ha ayudado a la compra de dos cruces rojas.
Es imposible no mencionar el proyecto Generazione d’Industria, creado hace una década a instancias de una serie de empresas inscritas en la Unión de Industriales de la provincia de Varese, encabezada por Tiziano Barea, fundador y presidente de BTSR. Desde sus inicios, el proyecto se ha propuesto difundir la cultura empresarial en el mundo escolar para que “las mejores empresas entren en contacto con los mejores estudiantes”, según palabras del propio Barea. En sus 10 años de existencia, Generazione d'Industria ha concedido becas a 500 estudiantes de 17 escuelas técnicas secundarias de la zona de Varese y ha involucrado a 63 empresas industriales, entre ellas LATI, que participa activamente en el proyecto.
Por tanto, BTSR es una realidad que quiere seguir creciendo e innovando de forma ecosostenible y junto con socios seleccionados como LATI, para sus propios colaboradores y para el mundo que nos rodea.