Descubre cómo EFEN, uno de los principales fabricantes alemanes de dispositivos electrotécnicos, decidió sustituir la cerámica utilizada en sus portafusibles e interruptores de la serie NG por el compuesto termoplástico autoextinguible de LATI, LATAMID 66 H2 G/50-V0HF1.
La cerámica es el primer material con el que se aislaron las aplicaciones destinadas a entrar en contacto directo con la corriente eléctrica. Con el tiempo, los aislantes de porcelana se han sustituido en muchas situaciones por plásticos termoestables como la baquelita, y más recientemente, estos han dado paso a los polímeros termoplásticos autoextinguibles.
La rigidez dieléctrica extremadamente alta, la resistencia térmica y química y la inalterabilidad en el tiempo son puntos fuertes inigualables de la cerámica, que se sigue utilizando hoy en día en la fabricación de aisladores de media y alta tensión.
Efen Gmbh es una empresa alemana líder en la producción de dispositivos electrotécnicos empleados para la gestión y distribución de energía eléctrica a nivel industrial y doméstico. En Efen, también se incluyen aisladores de porcelana el interior de los portafusibles, interruptores y disyuntores.
Sin embargo, la gran seguridad intrínseca de estos elementos cerámicos debe sopesarse con algunos inconvenientes inevitables ligados al propio material: la dificultad de instalación y montaje, la fragilidad que hace problemáticas las operaciones de atornillado y fijación y, por último, el peso y el precio.
Efen aceptó el reto de sustituir la cerámica de sus portafusibles e interruptores de la serie NH introduciendo un compuesto termoplástico autoextinguible de LATI, el LATAMID 66 H2 G/50-V0HF1. Sin duda, un proyecto con muchas incógnitas, todas ellas brillantemente afrontadas y superadas gracias a las prestaciones del material plástico, que consiste en una matriz de PA66 reforzada con un 50 % de fibra de vidrio y hecha resistente a las llamas gracias a un moderno sistema de aditivos de bajo impacto medioambiental, sin halógenos ni fósforo rojo.
El LATAMID 66 H2 G/50-V0HF1 ofrece una resistencia mecánica inigualable en el ámbito de los productos plásticos ignífugos gracias no solo a su resistencia a la tracción de casi 200 MPa, sino también a sus extraordinarios valores de alargamiento de rotura, resiliencia y módulo de elasticidad. La excelente resistencia a las corrientes de fuga queda demostrada por el CTI de 600 V y hace que su uso sea seguro incluso en presencia de altas tensiones.
La resistencia del material al fuego resulta fundamental, y está certificada por la clasificación UL94 V0 hasta 0,4 mm: un espesor muy bajo si se tiene en cuenta la composición del propio compuesto.
La validez de la propuesta de LATI queda también atestiguada por el amplio uso que este producto está teniendo también en ámbitos de aplicación igualmente exigentes, como el sector ferroviario, donde es obligatoria una baja emisión de humos y toxicidad en caso de incendio.
También cabe destacar que el LATAMID 66 H2 G/50-V0HF1 representa una alternativa sostenible a la cerámica gracias a su producción y transformación menos intensivas desde el punto de vista energético y a la ausencia sustancial de residuos no recuperables.
EFEN volvió a probar la calidad de la gama de productos autoextinguibles de LATI y eligió el LATAMID 66 H2 G/25-V0HF1, una versión menos reforzada del compuesto descrito anteriormente, para fabricar los elementos mecánicos del botón interruptor montado en los portafusibles verticales NH.
Juntas, Efen y LATI demuestran cómo pueden garantizar la fiabilidad y la durabilidad de sus soluciones técnicas operando desde un enfoque cada vez más centrado en el rendimiento y la sostenibilidad.